1 berenjena mediana
100 gr. queso Brie
tomate triturado
queso parmesano rallado
albahaca, aceite de oliva, sal
Preparación:
Lavamos y cortamos la berenjena en rodajas de un centímetro de grosor. Luego las ponemos en un bol son sal durante media hora.
Pasada la media hora las lavamos para quitarles la sal. En una fuente para horno ponemos un pequeño chorro de aceite de oliva y lo esparcimos con un pincel de cocina. Ponemos las rodajas en la fuente y metemos en el horno precalentado a 170 grados unos 15 minutos. Damos la vuelta a las rodajas y metemos en el horno otros 15 minutos.
Dejamos la mitad de las rodajas en la fuente espolvoreamos con albahaca y ponemos encima un pedacito de queso Brie y encima otra rodaja de berenjena. Espolvoreamos de nuevo con albahaca. Ponemos una cucharada de tomate triturado encima y espolvoreamos con queso parmesano. Metemos en el horno otros 15 minutos y servimos calentito.
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La berenjena contiene un 92% de agua y un 1,4% de fibra. Se trata de un alimento ligero siempre y cuando no se tome con mucha grasa, ya que por su textura esponjosa tiende a absorver mucha grasa.
La berenjena posee propiedades diuréticas y laxantes. Destaca en cuanto a vitaminas la presencia de vitaminas del grupo B y de la C. Los minerales que aporta son por ejemplo el fósforo, magnesio y por supuesto potasio.
Combina muy bien con el tomate y el calabacín.
Con verduras como estas se pueden preparar unos aperitivos exquisitos.
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